¿Qué son las convulsiones? - Tu Blog de salud y medicina

A menudo se ven los síntomas o expresiones físicas pero se desconoce por completo el significado del suceso. Las convulsiones son una etapa neural que ocurre por actividad elevada en el cerebro, esto conlleva a muchos movimientos corporales involuntarios y otras manifestaciones que dependiendo del nivel se dan o no.

¿Qué son las convulsiones?

Existen factores de riesgo que ponen a un individuo a poder padecerlas constantemente, otras convulsiones pueden ser aisladas y darse en cualquier edad y momento de la persona. Infórmate junto con nosotros de todo lo relacionado a este evento traumático para que puedas asegurarte de hacer lo correcto si llegas a presenciar uno.

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¿Qué lo ocasiona?

Generalmente, las convulsiones son un impulso eléctrico en el cerebro, su casusa es que este es muy fuerte y eso produce el evento traumático. Las personas que suelen presentar estos ataques muchas veces por días son aquellas a las que se denominan epilépticas.

En estos casos, las convulsiones son el resultado de la enfermedad epiléptica, la cual se puede deber a una lesión profunda e el cerebro o a una herencia genética. Básicamente lo que hace es interrumpir el curso normal de corriente en el cerebro y esto lleva a repetidos ataques. Según estudios registrados, esta condición no tiene cura aunque con el tratamiento se puede controlar.

Si de repente no tienes epilepsia pero has convulsionado una o dos veces en tu vida, tranquilo, estos episodios pueden ser monitoreados por expertos y tener fin, lo único que debes hacer es informarte un poco más y así podrás contribuir con tu granito de arena, por eso te animamos a seguir leyendo.

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Causas involucradas

Las convulsiones son incitadas comúnmente por muchos factores que afectan el funcionamiento óptimo del organismo. De este modo, el cuerpo reacciona y da a conocer su problema mediante estas señales físicas y cerebrales. Recuerda, no todos las personas reaccionan igual, algunas de las causas son:

  • Aumento descontrolado de algunas toxinas en la sangre.
  • Enfermedades que favorecen el deterioro cerebral como la meningitis.
  • Infecciones producidas por algunas bacterias. Son pocas pero estas se alojan en el cerebro causando en su mayoría abscesos u otros problemas que terminan en los episodios ya mencionados.
  • Niveles que no están dentro del parámetro como la glucosa o el sodio en la sangre.
  • Presencia de parásitos que se dan producto de alimentos mal cocidos.
  • En niños la fiebre alta suele ser un detonante.
  • Abuso de sustancias tóxicas para el organismo como drogas o alcohol.
  • Accidente cerebrovascular.

Síntomas o manifestaciones

Son muchas las formas en que una convulsión puede manifestarse, por lo general los signos son físicos y visibles a simple vista; sin embargo otros requieren de mucha atención para poder saber de qué se habla de este episodio. Algunos signos son:

  • Mirada fija o perdida. Un signo muy común en bebés pequeños, a menudo los padres creen que se debe a su forma de ser, sin embargo no en todos los casos aplica. Se caracteriza por períodos cortos o medianos de tiempo en que la persona mira fijamente un punto sin parpadear, ante estos episodios no se suele recordar lo vivido.
  • El miedo y la ansiedad son recurrentes síntomas emocionales, la persona las demuestra de modo intenso y sin razón alguna; suelen ser la alarma que antecede al ataque.
  • Ausencias mentales o “lagunas” se dan en aquellos individuos que padecen las convulsiones por alguna falla en el cerebro.
  • Confusión temporal y rápida en ciertas ocasiones.
  • Los signos físicos que con mayor frecuencia se presentan son los movimientos incontrolables y repetitivos de brazos y piernas.
  • Ojos hacia arriba mientras sucede el acontecimiento.
  • Pérdida repentina de conciencia.
  • Luces parpadeantes en la vista.
  • Movimientos repetitivos como frotarse las manos o agarrarse ciertas partes del cuerpo.
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Las convulsiones son episodios de especial cuidado, que deben ser reportadas de inmediato a un especialista en la salud para que pueda evaluar todo lo necesario para no volver a repetir esta experiencia o simplemente controlarla.

Sumado a esto, los episodios pueden representar un peligro latente para tu integridad dependiendo del lugar o actividad que estés realizando, algunos de ellos son:

  • Caídas muy fuertes, lo que puede ocasionar hematomas en el cuerpo o lesiones mayores. Cuando ocurre la convulsión el cerebro pierde el control y entonces el mismo se desvanece y comienzan las dificultades.
  • Descontrol emocional. A raíz de las constantes convulsiones, la parte psicológica se ve afectada.
  • Embarazos sin un término feliz o simplemente con muchas complicaciones.
  • Accidentes de todo tipo pues no se sabe el momento ni la hora en que los episodios van a aparecer.
  • Muerte por ahogo o cualquier otro motivo.
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¿Cuándo acudir al médico?

Recomendamos ir al primer episodio que ocurra. Las convulsiones son el resultado de un desequilibrio eléctrico en el cerebro, este órgano es el centro de operaciones de nuestro organismo por así decirle así que su bienestar o enfermedad va a influir de forma positiva o negativa en nosotros.

A pesar de la información dada anteriormente, hay signos que suelen ser mucho más complicados a los cuales no debe sin siquiera pensar en la posibilidad de no ir a un centro de salud, estos son:

  • Convulsiones que duran más de 6 minutos.
  • Fiebre muy alta que no cede con nada.
  • Pérdida de conciencia aún después de culminado el episodio.
  • Tienes episodios repetidos de forma muy cercana.
  • Se produjo un daño mayor durante el ataque.
  • Estar embarazada durante una convulsión.

¿Qué hacer en caso de presenciar un ataque?

En caso de observar a una persona sufriendo de una convulsión, debes conservar la calma y aplicar ciertos conocimientos básicos para proteger la salud del individuo afectado, estas son:

  • Quitar del camino elementos punzantes o peligrosos para la persona que tiene el ataque.
  • Evitar que se aglomere gente alrededor que quita el oxígeno vital.
  • Si la familia lo permite, intenta desabrochar las camisas y aquellas cosas muy ajustadas.
  • No introduzcas objetos a la boca de la persona.
  • No lo agarres ni intentes frenar los movimientos.
  • Llama de inmediato a una ayuda médica externa.

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