Aprende mas acerca de la Espina bífida

Conoce con nosotros todo lo relacionado a este defecto de nacimiento denominado espina bífida. Se trata de una malformación de la médula espinal, esta, no se desarrolla correctamente y por lo tanto los bebés nacen sin la posibilidad de caminar en algunos casos.

La columna constituye todo el órgano que permite que nuestro cuerpo se mantenga erguido y seamos seres bípedos, al no cerrarse o formarse correctamente comienzan los problemas para desplazarnos en dos piernas.

Tabla de contenidos

Mapa del Contenido:

Causas de la espina bífida
Tipos de espina bífida
¿Cuáles son los signos o síntomas de esta enfermedad?
¿Cómo se diagnostica?
¿Existe algún tratamiento efectivo?
¿La espina bífida puede evitarse?

Causas de la espina bífida

No se ha determinado aún a ciencia cierta que ocasiona este defecto, aunque existen ciertos factores de riesgos ambientales y genéticos, estos son:

Herencia de malformaciones. Si en la familia existe un miembro con alguna malformación es necesario asistir al médico y contarle todo el historial familiar para tomar medidas de precaución con respecto a este tema.
La edad avanzada de la madre. La vida útil para poder procrear sanamente se encuentra a partir de los 20 hasta los 36, después de allí, se deben consumir más vitaminas y complementos y mantener un cuidado especial con el feto para evitar cualquier inconveniente en el desarrollo, a pesar de esto, hay mujeres jóvenes que pueden tener bebés con espina bífida por otras causas.
Ingesta de medicamentos durante la gestación. Está demostrado a nivel médico que algunas pastillas y jarabes causan malformaciones en el feto si no se toman bajo vigilancia médica. Los primeros meses del embarazo son claves para el desarrollo óptimo del bebé.
Falta de ácido fólico. El consumo de este suplemento es muy importante, el ayuda a mantener fuertes los huesos y a aumentar el desarrollo óptimo de los tejidos y órganos. La espina bífida es un defecto propio del tubo neural (responsable de manejar la columna vertebral y la médula espinal), el ácido fólico va a fortalecerlo evitando las malformaciones a toda costa.
Otros factores biológicos como una enfermedad de la madre, obesidad, problemas de azúcar, viajes a lugares de riesgo, entre otros.

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Tipos de espina bífida

Está malformación congénita se clasifica en dos grandes grupos llevando sus complicaciones de menor a mayor grado, los tipos de espina bífida son:

Oculta: no causa mayores complicaciones, de hecho, la mayoría de los afectados conoce este defecto en su cuerpo a menos que lo descubran mediante una radiografía por otros motivos.
Mielomeningocele: se desarrolla una abertura muy pronunciada en la parte baja o media de la espalda. Es la más ardua de todas ya que en ciertos casos, suelen ser la mayoría, los afectados no pueden caminar a menos que se sometan a terapias y aun así si el espacio no puede aminorarse continuarán toda su vida con la consecuencia.

Dentro de estos grandes grupos, se encuentran dos inmersos que constituyen problemas espinales leves o graves con consecuencias dependiendo de su grado de afección.

El tubo neural puede presentar un sinfín de inconvenientes, la espina bífida es solo uno de ellos, por ello, pueden existir personas con una o vertebras dañadas o malformadas sin darse cuenta, otras con hemiplejía por estas deformidades y así muchas más.

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¿Cuáles son los signos o síntomas de esta enfermedad?

La espina bífida es una enfermedad localizada en la medula espinal y parte de la columna vertebral que presenta los siguientes síntomas:

Vellos, manchas u hoyuelos pequeños en la piel en donde se encuentra la malformación, esto es en el caso del primer tipo en donde por lo general no suele haber discapacidad.
Un saco visible en la espalda lleno de líquido.
Una protuberancia en la espalda en forma de piel acumulada.
A veces la médula suele salirse y se encuentra visible para todos al final de la espalda.

¿Cómo se diagnostica?

Se detecta mucho antes del nacimiento en aquellos casos que son muy graves, algunos pasan desapercibidos si son insignificantes y otros jamás llegan a saberse ya que no presentan síntomas ni consecuencias.

Mediante una ecografía es muy fácil saber si el bebé viene con el tipo de espina bífida más complejo, así los padres van a prepararse durante la gestación para el instante de su nacimiento estar listos para tomar las medidas más convenientes que ayuden al progreso óptimo del chiquillo.

¿Existe algún tratamiento efectivo?

Por los momentos, la espina bífida es una anomalía que no puede curarse (en ciertos casos) pero sí evitarse antes del embarazo, aunque, recientemente, los médicos han desarrollado una cirugía fetal que consiste en arreglar el tejido que está abierto durante la gestación.

Muchos riesgos engloba esta cirugía, sin embargo, los beneficios que se han obtenido son maravillosos en cuanto al daño cerebral que se corrige en el bebé, los avances significativos que realiza antes de nacer y muchas otras habilidades que va adquiriendo gracias a la intervención.

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Posterior a ello, hay muchos niños que no requieren de otra intervención sino de diversas ayudas que lo animen a progresar poco a poco, otros, por su parte, necesitan de otras cirugías para afinar esos detalles de deformación aun visibles y lograr tener una vida normal.

¿La espina bífida puede evitarse?

Muchos estudios científicos y médicos han demostrado que sí, aunque, eso no garantiza en un cien por ciento que si existe predominancia genética el bebé pueda venir con una malformación pero si puede ayudar a aminorarla y en la mayoría de los casos a erradicarla.

El ácido fólico, es un excelente complemento en las dietas alimenticias y también viene en ampollas para su consumo diario, este, ayuda en gran manera a prevenir malformaciones de todo tipo en el ser humano. Las mujeres en edad de tener bebés deben incluirlo siempre en las cantidades que el médico considere.

La espina bífida es una de las tantas deformidades que el ácido fólico puede prevenir si se consume incluso antes de quedar embarazada, además, ayuda en la prevención del autismo y otros síndromes; en los bebés sanos suscita el perfeccionamiento de la inteligencia ¡Vaya vitamina!